Publicado miércoles 7 de febrero de 2024 en BEEP por Club Beep
¿Qué vas a ver aquí?
Montar una televisión no es tan sencillo. Estos últimos años es probable que hayas montado más de una televisión en la pared o con un soporte de pie. El gran reto, no hace falta decirlo, es montar la tele en una pared y conseguir que todo salga bien: que la TV no resulte dañada en el proceso y que la experiencia de visionado frente a la pantalla sea satisfactoria. Para que el montaje sea un éxito, te decimos qué errores son más habituales al montar la televisión.
¿Has pensado en cambiar de televisión?
Sea como sea, si te cambias de tele y tienes que montarla, los consejos de montaje que te ofrecemos aquí seguro que van a ser de ayuda.
Uno de los principales factores de éxito al montar una televisión es planificar.
La primera reflexión que debes hacer es sobre la distancia de visionado. Necesitas comprar una pantalla que, además de satisfacer tus expectativas de calidad de imagen, se vea bien a la distancia a la que piensas verla. ¿Dónde vas a poner o colgar la televisión? ¿Cuál va a ser el principal lugar —sillón, sofá— desde el que vas a disfrutar de tus programas o filmes favoritos? El cálculo de la distancia idónea es básico. Por ello, te recomendamos que leas el artículo del blog de BEEP A qué distancia mirar la televisión.
Una vez tienes clara la distancia y, a partir de ahí, sabes la televisión que vas a comprar, debes pensar en el soporte o sistema de sujeción. ¿Qué soporte se ajusta de manera óptima a tu nueva TV?
Accesorios y soportes para la TV
Piensa que si compras un soporte de pie (que suele venir con la TV) o de pared que no es compatible o adecuado para la pantalla, tienes un problema serio. Ni se te ocurra comenzar con el proceso de montaje, porque podrías poner en peligro no solo el televisor o muebles, sino también personas. Las estructuras de soporte o fijación establecen de forma clara las dimensiones y los pesos de la TV para los que están diseñadas.
Antes de hacer agujeros en la pared con el taladro, debes calcular la altura a la que montarás la TV.
Para una experiencia visual óptima, el centro de la pantalla debe estar a la altura de tus ojos desde la posición de visionado. La tele no debe estar ni demasiado alta (un error frecuente) ni demasiado baja. Así evitas tensionar el cuello al elevar la mirada, o bien al bajarla.
Errores de montaje de la televisión a evitar:
Vinculada a la recomendación de la altura va otra recomendación, que quizás tengamos más presente: hay que centrar la televisión también en el plano horizontal. La posición principal de visionado del espectador debe tomarse como referencia para hacer un montaje centrado. Básicamente, eso significa que la tele debe estar enfrente del espectador o espectadores. La idea es evitar tener que mantener el cuello girado, ni que sea levemente, durante las horas de visionado de la televisión.
La televisión debe estar a la altura de los ojos y centrada. Las reglas están muy claras. Son las que rigen en las salas de cine. Siempre que pueden, los espectadores evitan las primeras filas, para así evitar tener que echar el cuello hacia atrás, y los asientos más cercanos a los extremos, que obligan a girar la cabeza.
Sin embargo, si no tienes claro en qué parte de la pared poner la televisión (falta de espacio, obstáculos que ahora no puedes retirar, etcétera), lo mejor es que utilices un soporte de pie que puedas emplazar en un mueble. Estos soportes elevan poco la TV, para evitar que la pantalla gane demasiada altura.
Regresamos a una idea que hemos comentado antes. Es recomendable planificar y reflexionar sobre el montaje, y tener clara la distancia de visionado, que es la que va a determinar el número de pulgadas óptimo para una buena experiencia como televidente.
La distancia de visionado es la que hay entre la pantalla y la posición principal de visionado. Para saber esta distancia, deberás hacerte un par de preguntas. ¿Qué pared será mejor para colgar la tele? ¿Dónde puedo poner el sofá?
Ten presente que deberías disfrutar de un campo visual de entre 30 y 40 grados y que, para ver una televisión Ultra HD, te deberías sentar más cerca. Ahora bien, al final, la calidad de la experiencia de visionado siempre va a ser personal, por lo que tú eres quien debe juzgar qué distancia es la adecuada.
Si has elegido una pared, has montado ya la tele y no te acaba de convencer la experiencia visual, la opción que te queda, si es posible, es alejar o acercar el sofá. Pero no debería hacer falta recurrir a esta medida, porque antes de colgar la pantalla en la pared, la podrías poner en un soporte de pie para comprobar que la distancia es correcta.
El soporte de pared debe quedar completamente oculto por la pantalla. Por eso es tan importante elegir el soporte adecuado para la TV. El soporte debe garantizar que aguanta los kilos de la tele.
Antes de hacer agujeros en la pared y comenzar a montar, es una buena idea comparar las dimensiones de la estructura que va a la pared con las dimensiones de la televisión.
Los sistemas de fijación de pared son más limpios desde un punto de vista estético, y casi obligatorios si tienes niños pequeños o animales domésticos en casa. Un soporte de pie podría volcar por golpes, empujones o presiones fortuitas. Además, la TV montada sobre estos soportes está más expuesta a daños, al estar más en primer plano que si estuviese colgada en la pared.
Dicho esto, no deberías descartar de buenas a primeras un soporte de pie. Si vives de alquiler o no tienes claro si montar en la pared es la mejor opción, el soporte de pie es seguro, siempre y cuando, como hemos explicado, no haya niños o animales domésticos en la residencia.
Un error de montaje es no pensar en cómo tener los cables ocultos o, al menos, recogidos de algún modo. Los cables pueden ir por la pared, que es la opción más limpia. Para esta canalización, es probable que necesites un profesional. Pero hay otras alternativas, como canaletas, molduras u organizadores de cables.
Uno de los errores más comunes al montar la televisión es pretender hacerlo sin ayuda.
Recuerda que las televisiones son delicadas y vulnerables. Una presión excesiva en la superficie de la pantalla puede romperla. Por ello es importante saber cómo sujetar y manipular la pantalla durante el proceso de montaje, para así evitar daños.
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